Imagina la situación. Vuelves al lugar donde has dejado el coche. Entras, giras la llave en el contacto, el motor se pone en marcha y cuando levantas la vista encuentras un billete en el parabrisas. ¿Qué harías? No digas lo que estás pensando, porque es un error. Si encuentras un billete de 50 euros en el parabrisas, no debes cogerlo. Este